100 motivos para Visitar Bilbao
¡Bienvenido a la guía definitiva para exprimir al máximo tu viaje a Bilbao! Esta ciudad, corazón palpitante de Bizkaia, ha sabido reinventarse como pocas, fusionando su pasado industrial con una modernidad deslumbrante y una cultura vibrante. Si estás planeando visitar Bilbao, prepárate para una experiencia llena de sorpresas: arquitectura icónica, gastronomía de fama mundial, paisajes verdes y una energía contagiosa. Aquí desgranaremos todo lo que necesitas saber para que tu escapada sea sencillamente perfecta. ¡Empezamos!
12 Lugares Imprescindibles que Visitar en Bilbao
Bilbao es una ciudad llena de rincones con encanto, monumentos impactantes y espacios llenos de vida. Aunque lo ideal es perderse por sus calles, hemos seleccionado 12 puntos clave que no deberían faltar en tu itinerario. ¡Toma nota!
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Museo Guggenheim Bilbao
Empezamos fuerte con el indiscutible símbolo de la transformación bilbaína. Esta obra maestra del arquitecto Frank Gehry, con sus curvas imposibles de titanio, vidrio y piedra caliza, es mucho más que un contenedor de arte; es una escultura en sí misma. Pasear por su atrio luminoso o contemplarlo desde la Ría del Nervión es una experiencia inolvidable. Alberga importantes colecciones de arte moderno y contemporáneo, pero sus exteriores son igualmente fascinantes. No olvides las fotos de rigor con 'Puppy', el icónico perro floral de Jeff Koons, y 'Mamá', la imponente araña de Louise Bourgeois. Sin duda, el primer lugar que muchos desean ver al llegar a Bilbao.
Dedica tiempo a explorar también sus alrededores, como el Puente de La Salve, perfectamente integrado con el museo, o el parque de la Campa de los Ingleses. La visita al Guggenheim puede llevarte fácilmente media jornada si te sumerges en sus exposiciones temporales y permanentes. Planifica con antelación y compra tus entradas online para evitar colas, especialmente en temporada alta. Es una parada obligatoria en cualquier guía para visitar Bilbao.
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Casco Viejo (Las Siete Calles)
Sumérgete en el corazón histórico y el alma de la ciudad: el Casco Viejo o 'Zazpi Kaleak' en euskera. Sus Siete Calles originales (Somera, Artecalle, Tendería, Belosticalle, Carnicería Vieja, Barrencalle y Barrencalle Barrena) son un laberinto peatonal lleno de vida. Aquí encontrarás desde tiendas centenarias hasta boutiques modernas, y sobre todo, una concentración espectacular de bares donde degustar los famosos pintxos. Es el lugar perfecto para sentir el pulso de la ciudad, especialmente al atardecer y los fines de semana.
Además de perderte por sus cantones, no dejes de visitar la Catedral de Santiago, un hermoso ejemplo de gótico vasco dedicada al patrón de la ciudad. También acércate a la Plaza Unamuno, siempre animada, o al Museo Vasco (Euskal Museoa) para profundizar en la historia y etnografía vasca. El ambiente del Casco Viejo te atrapará, invitándote a volver una y otra vez durante tu estancia.
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Mercado de la Ribera
Situado junto a la ría, al borde del Casco Viejo, el Mercado de la Ribera ostenta el título de ser uno de los mercados cubiertos de abastos más grandes de Europa. Su edificio de estilo art déco es ya de por sí interesante, con amplias vidrieras que inundan de luz su interior. Pero lo mejor es la vida que bulle dentro: puestos repletos de pescado fresco del Cantábrico, carnes de caseríos locales, frutas, verduras, quesos Idiazabal y otros manjares. Es un espectáculo para los sentidos.
Además de hacer la compra como un bilbaíno más, en los últimos años el mercado ha incorporado una zona de gastrobares en la planta baja. Aquí puedes degustar pintxos, raciones y bebidas en un ambiente informal y animado, con vistas a la ría. Es un lugar excelente para tomar el pulso gastronómico de la ciudad y probar productos locales de primera calidad preparados al momento. Una visita muy recomendable cuando decides viajar a Bilbao.
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Plaza Nueva
Dentro del Casco Viejo, la Plaza Nueva (Plaza Barria) es un oasis de tranquilidad y un punto de encuentro fundamental. De estilo neoclásico, porticada y cerrada, recuerda a las plazas mayores castellanas. Sus soportales albergan numerosos bares y restaurantes con terrazas, convirtiéndola en un lugar ideal para el aperitivo, especialmente los domingos. De hecho, cada domingo por la mañana acoge un animado mercado de coleccionismo (sellos, monedas, libros...).
La plaza es también famosa por ser uno de los epicentros del poteo y los pintxos. Sentarse en una de sus terrazas a observar el ir y venir de la gente mientras disfrutas de un txakoli y alguna delicia local es uno de los pequeños grandes placeres de Bilbao. Fíjate también en el edificio que alberga la sede de Euskaltzaindia, la Real Academia de la Lengua Vasca.
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Teatro Arriaga
Situado majestuosamente a la entrada del Casco Viejo, frente al Puente del Arenal, el Teatro Arriaga es uno de los edificios más bellos y emblemáticos de Bilbao. De estilo neobarroco e inspirado en la Ópera Garnier de París, fue inaugurado en 1890 y dedicado al compositor bilbaíno Juan Crisóstomo de Arriaga, conocido como el "Mozart español". Su fachada ricamente ornamentada es una maravilla.
Aunque sufrió un grave incendio y una inundación histórica, ha sido restaurado y sigue siendo el principal escenario de la ciudad, acogiendo ópera, teatro, danza y conciertos. Si tienes oportunidad, consulta su programación y asiste a algún espectáculo para admirar también su suntuoso interior. Si no, simplemente contemplarlo desde El Arenal, el parque adyacente, ya merece la pena. Es un punto de referencia visual indispensable al explorar Bilbao.
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Mirador de Artxanda (y Funicular)
Para obtener una perspectiva diferente y unas vistas panorámicas espectaculares de Bilbao y su entorno, la subida al Monte Artxanda es imprescindible. La forma más cómoda y encantadora de hacerlo es utilizando el histórico Funicular de Artxanda, un tren cremallera rojo que lleva funcionando desde 1915 y salva el desnivel en apenas 3 minutos. La estación inferior está cerca del Puente Zubizuri.
Una vez arriba, te espera el mirador conocido como "el balcón de Bilbao". Desde aquí, la vista abarca toda la ciudad encajada en el valle, la sinuosa ría, el Guggenheim, el estadio de San Mamés y las montañas circundantes. Hay un parque, esculturas (como la Huella Dactilar), y varios restaurantes tradicionales donde disfrutar de la gastronomía vasca con vistas. Es especialmente mágico al atardecer, cuando las luces de la ciudad comienzan a encenderse.
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Puente Zubizuri y Paseo por la Ría
La Ría del Nervión es el eje vital de Bilbao y recorrer sus márgenes es una de las mejores maneras de entender la ciudad y su evolución. Un punto destacado en este paseo es el Puente Zubizuri (Puente Blanco en euskera), diseñado por Santiago Calatrava. Su estructura arqueada de acero blanco y su pasarela de cristal (aunque ahora cubierta en parte por una alfombra antideslizante por motivos prácticos) lo convierten en uno de los iconos modernos de la ciudad.
El paseo ribereño, especialmente entre el Ayuntamiento y el Palacio Euskalduna, es una delicia. Pasarás bajo puentes históricos como el del Arenal o el de Deusto (levadizo), y modernos como el de Calatrava o el de La Salve (integrado con el Guggenheim). Disfrutarás de vistas cambiantes, zonas ajardinadas, esculturas urbanas y la brisa de la ría. Es un plan perfecto para hacer a pie o en bicicleta en cualquier momento del día. Una actividad relajante fundamental al visitar Bilbao.
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Azkuna Zentroa (Alhóndiga Bilbao)
Este espectacular centro cívico y cultural es un ejemplo magistral de reconversión arquitectónica. Lo que fue un antiguo almacén de vinos de estilo modernista, diseñado por Ricardo Bastida a principios del siglo XX, fue transformado por el diseñador Philippe Starck en un espacio multifuncional vibrante y único. El cambio de nombre rinde homenaje a Iñaki Azkuna, alcalde impulsor de la gran transformación de Bilbao.
Lo más llamativo de Azkuna Zentroa es su atrio interior, conocido como la "Plaza de las Culturas", sostenido por 43 columnas, cada una con un diseño diferente que representa diversas culturas y momentos históricos, obra del escenógrafo Lorenzo Baraldi. Alberga cines, salas de exposiciones, mediateca, gimnasio, una piscina con fondo transparente visible desde abajo, tiendas y restaurantes. Es un lugar lleno de vida donde siempre pasa algo. No dejes de entrar a maravillarte con sus columnas.
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Museo de Bellas Artes de Bilbao
Aunque a menudo eclipsado por el Guggenheim, el Museo de Bellas Artes (Bilboko Arte Ederren Museoa) posee una de las colecciones de arte más importantes de España. Fundado en 1908, alberga más de 10.000 obras que abarcan desde el siglo XIII hasta la actualidad, con un énfasis especial en el arte vasco, pero también con excelentes ejemplos de arte español (El Greco, Ribera, Murillo, Goya, Sorolla, Zuloaga...) y europeo (Van Dyck, Gentileschi, Gauguin, Bacon...).
El museo ocupa dos edificios conectados: uno neoclásico original y una ampliación moderna. Actualmente está inmerso en un ambicioso proyecto de expansión diseñado por Norman Foster, que promete darle aún mayor relevancia. Dedicarle unas horas es fundamental para cualquier amante del arte que decida visitar Bilbao. Se encuentra junto al Parque de Doña Casilda, lo que permite combinar la visita cultural con un paseo relajante.
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Basílica de Begoña
Dominando la ciudad desde una colina, la Basílica de Nuestra Señora de Begoña es uno de los templos más queridos por los bilbaínos. Dedicada a la patrona de Bizkaia, la "Amatxu" de Begoña, es un imponente edificio mayoritariamente gótico del siglo XVI, aunque con añadidos posteriores. Su portada principal renacentista es notable. Para llegar, puedes dar un paseo cuesta arriba o tomar el ascensor de Mallona desde la Plaza Unamuno en el Casco Viejo.
El interior alberga el camarín con la imagen de la Virgen de Begoña, objeto de gran devoción popular, especialmente durante las festividades del 15 de agosto y el 11 de octubre. Además, las vistas de Bilbao desde la explanada de la basílica son bastante buenas, ofreciendo otra perspectiva de la ciudad. Es un lugar con un fuerte significado local y un ejemplo importante de arquitectura religiosa vasca.
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Estación de Abando (Indalecio Prieto) y sus Vidrieras
Incluso si no vas a coger un tren, merece la pena entrar en la principal estación de ferrocarril de Bilbao, la Estación de Abando (oficialmente Indalecio Prieto). No tanto por su arquitectura exterior, sino por la impresionante vidriera policromada que decora su vestíbulo principal. Realizada en 1948 por la Unión de Artistas Vidrieros de Irún, ocupa 301 paneles y representa diversas escenas de la vida, el trabajo y las tradiciones vascas, así como símbolos del progreso industrial de Bizkaia.
Es una obra de arte monumental que glorifica el esfuerzo y la identidad local, con representaciones de arrantzales (pescadores), baserritarras (campesinos), mineros, la industria siderúrgica, el árbol de Gernika y la Basílica de Begoña. Tómate tu tiempo para admirar los detalles de esta catehdral laica del trabajo. La estación se encuentra en pleno centro de Bilbao, en el Ensanche.
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Palacio Euskalduna
Otro icono de la arquitectura contemporánea bilbaína, el Palacio Euskalduna Jauregia es un centro de congresos y de la música situado en el lugar donde antiguamente se ubicaban los astilleros Euskalduna, de ahí su diseño inspirado en un buque en construcción. Obra de los arquitectos Federico Soriano y Dolores Palacios, su fachada de planchas de acero corten oxidado evoca el pasado industrial de la zona.
Inaugurado en 1999, alberga un gran auditorio (sede de la Orquesta Sinfónica de Bilbao - BOS), salas de convenciones y espacios para exposiciones. Ha sido reconocido internacionalmente como uno de los mejores centros de congresos del mundo. Aunque su principal atractivo es asistir a algún evento, pasear por sus alrededores, junto a la ría y cerca del Museo Marítimo, permite apreciar su imponente y simbólica arquitectura. Complementa perfectamente la ruta moderna al visitar Bilbao.
Actividades para Disfrutar al Máximo tu Visita a Bilbao
Bilbao no es solo para verla, ¡es para vivirla! Más allá de sus monumentos, la ciudad ofrece un sinfín de experiencias que te permitirán sumergirte en su cultura, su ambiente y sus pasiones. Aquí te proponemos algunas actividades imprescindibles.
Ir de Pintxos: Un Ritual Imprescindible
Ya lo hemos mencionado, pero es que ir de pintxos en Bilbao es mucho más que comer; es un acto social, una tradición arraigada y una forma deliciosa de descubrir la esencia de la ciudad. Olvídate de sentarte a cenar formalmente una noche y lánzate al "txikiteo": ir de bar en bar (normalmente de pie en la barra o en mesas altas), tomando "txikitos" (pequeños vasos de vino), "zuritos" (pequeños vasos de cerveza) o txakoli, y probando uno o dos pintxos en cada local. Las zonas estrella son el Casco Viejo (Plaza Nueva, Santa María, Somera...) y calles del Ensanche como Ledesma o Diputación.
La variedad es abrumadora: desde los clásicos como la Gilda (aceituna, guindilla, anchoa) o la tortilla de patatas, hasta sofisticadas creaciones de alta cocina en miniatura. ¡Déjate llevar por la vista y atrévete a probar! Es una experiencia fundamental para cualquiera que quiera disfrutar Bilbao como un local.
Asistir a un Partido del Athletic Club
El fútbol en Bilbao es una religión y el Athletic Club es su dios. Con su política única de jugar solo con futbolistas nacidos o formados en el País Vasco, el club es un símbolo de identidad y orgullo local. Si tu visita coincide con un partido en casa, vivir el ambiente del estadio de San Mamés, conocido como "La Catedral", es una experiencia inolvidable, incluso si no eres un gran aficionado al fútbol.

El estadio en sí es una maravilla arquitectónica moderna, y el fervor de los aficionados, los cánticos y la atmósfera general son contagiosos. Consulta el calendario de LaLiga y, si puedes, consigue entradas. También puedes visitar el Museo del Athletic Club y hacer un tour por el estadio en días sin partido para conocer su historia y sus instalaciones.
Disfrutar de la Agenda Cultural y Festiva
Bilbao es una ciudad culturalmente muy activa. Su evento estrella es la Aste Nagusia (Semana Grande) en agosto, nueve días de fiesta ininterrumpida con la entrañable Marijaia como símbolo, conciertos gratuitos, fuegos artificiales espectaculares sobre la ría, teatro de calle, actividades infantiles y un ambiente increíble. Pero la oferta cultural va mucho más allá.
A lo largo del año, la ciudad acoge importantes festivales como el Bilbao BBK Live (música pop-rock en verano), el BIME (industria musical y nuevas tecnologías en otoño), Zinebi (festival internacional de cine documental y cortometraje) o Musika-Música (festival de música clásica). Además, el Teatro Arriaga, el Palacio Euskalduna, la Sala BBK y otros espacios ofrecen una programación constante de teatro, danza, ópera y conciertos. ¡Consulta la agenda antes de viajar a Bilbao!
Recorrer la Ría en Barco
Ver Bilbao desde el agua ofrece una perspectiva completamente diferente y muy recomendable. Varias empresas ofrecen paseos en barco por la Ría del Nervión, permitiéndote admirar la transformación de sus márgenes, desde el Casco Viejo hasta la desembocadura en el mar (en El Abra), pasando por los puentes emblemáticos y los edificios icónicos como el Guggenheim o el Euskalduna.
Estos paseos suelen durar entre una hora y dos horas y media, dependiendo del recorrido (algunos llegan hasta Getxo y Portugalete para ver el Puente Colgante desde abajo). Es una forma relajante y muy gráfica de entender cómo la ría ha moldeado la ciudad y cómo Bilbao se ha abierto a ella. Algunos barcos incluso ofrecen servicio de bar a bordo.
Relajarse en Parques y Zonas Verdes
Aunque Bilbao es una ciudad compacta y vibrante, también ofrece espacios para desconectar y disfrutar de la naturaleza sin salir de ella. El principal pulmón verde es el Parque de Doña Casilda Iturrizar, un elegante jardín de estilo inglés y francés junto al Museo de Bellas Artes, con un estanque con patos, cisnes y pavos reales, una pérgola y árboles centenarios. Es perfecto para un paseo tranquilo.
Otro gran espacio verde es el Parque Etxebarria, situado en una colina donde antes había una fábrica de acero. Ofrece unas vistas magníficas del Casco Viejo y el Arenal, y es el lugar donde se instalan las barracas y el circo durante la Aste Nagusia. Además, los paseos junto a la ría, como el de Abandoibarra o el de Uribitarte, también ofrecen zonas ajardinadas para relajarse. Necesitarás estos descansos si quieres ver Bilbao a fondo.
Shopping: Del Lujo a la Artesanía
Si te apetece ir de compras, Bilbao satisface todos los gustos. La Gran Vía Don Diego López de Haro es la arteria comercial por excelencia, flanqueada por edificios señoriales y repleta de grandes firmas de moda nacionales e internacionales, joyerías y grandes almacenes como El Corte Inglés. Las calles adyacentes del Ensanche (Ercilla, Rodríguez Arias, Colón de Larreátegui) complementan esta oferta más exclusiva.
Para compras con más encanto y personalidad, dirígete al Casco Viejo. Sus Siete Calles y alrededores están llenas de pequeñas boutiques, tiendas de diseñadores locales, librerías, comercios tradicionales (sombrererías, tiendas de alpargatas) y tiendas de productos vascos (artesanía, gastronomía). También encontrarás tiendas de recuerdos originales. ¡Explora y déjate sorprender!
Gastronomía Vasca: Un Festín para el Paladar en Bilbao
No se puede hablar de Bilbao sin dedicar un capítulo extenso a su gastronomía. Comer en Bilbao (y en todo el País Vasco) es una experiencia cultural de primer nivel. Desde los humildes pero deliciosos pintxos hasta los restaurantes con estrellas Michelin, la calidad del producto y el buen hacer en los fogones son señas de identidad.
El Universo del Pintxo: Más que una Tapa
El pintxo es el rey del aperitivo y del picoteo informal. A diferencia de la tapa (que en muchos lugares de España se sirve gratis con la bebida), el pintxo se paga aparte y suele ser más elaborado. Se exponen en las barras de los bares creando un espectáculo visual irresistible. Hay cientos de variedades: fríos (ensaladilla, jamón, queso, marisco...) y calientes (champiñones, bacalao, foie, carrilleras...), tradicionales y vanguardistas.

Lo habitual es pedir uno o dos pintxos por bar, acompañados de un txikito (vino tinto joven), un zurito (caña corta de cerveza) o un txakoli (vino blanco local). Zonas como la Plaza Nueva, Calle Santa María, Ledesma o Diputación son perfectas para una ruta. Pregunta por las especialidades de cada casa. ¡Es la mejor forma de probar muchas cosas distintas! Una experiencia culinaria esencial al visitar Bilbao.
Platos Emblemáticos de la Cocina Bilbaína
Cuando te sientes a la mesa en un restaurante tradicional (un "jatetxea"), prepárate para platos sabrosos y contundentes basados en el producto local. El bacalao es protagonista, preparado de mil formas, siendo las más famosas al pil-pil (con una emulsión de aceite de oliva y la gelatina del pescado) y a la vizcaína (con una salsa roja hecha a base de pimiento choricero y cebolla). Las kokotxas (carnosidad bajo la barbilla de la merluza o el bacalao) en salsa verde son otra delicia.
No te pierdas tampoco el marmitako (un guiso marinero de bonito con patatas, pimientos y cebolla), el txangurro a la donostiarra (carne de centollo desmigada y gratinada en su caparazón), las alubias de Tolosa (negras, acompañadas de sus "sacramentos": berza, morcilla, chorizo, costilla...), o un buen chuletón de buey o vaca vieja a la brasa. La calidad de la materia prima es excepcional.
Los Templos del Producto: Mercados y Tiendas Gourmet
Para entender la base de esta excelente cocina, nada como visitar sus mercados. El Mercado de la Ribera es el más grande y emblemático, un festín para la vista y el olfato con sus puestos de pescado fresco, marisco, carne, verduras de temporada, quesos y panes. Es el lugar perfecto para comprar productos locales de calidad o simplemente para curiosear y disfrutar del ambiente.
Además de La Ribera, hay otros mercados de barrio interesantes y numerosas tiendas especializadas y ultramarinos gourmet, sobre todo en el Casco Viejo y el Ensanche. Aquí podrás comprar conservas del Cantábrico (anchoas, bonito), embutidos vascos, pimientos de Gernika, guindillas de Ibarra, queso Idiazabal con denominación de origen, o dulces artesanos. Son souvenirs deliciosos para llevarte a casa tras visitar Bilbao.
Dulces Típicos: Carolina, Pastel de Arroz, Bollo de Mantequilla
Los más golosos también encontrarán su paraíso en Bilbao. Las pastelerías locales ofrecen una tentadora variedad de dulces tradicionales. No puedes irte sin probar la Carolina, un icónico pastelito con base de hojaldre, merengue y "baños" de yema y chocolate. Tampoco el Pastel de Arroz, que curiosamente no lleva arroz (su base es de hojaldre o masa quebrada y el relleno una crema similar a la pastelera).
Otro clásico imprescindible es el Bollo de Mantequilla, un bollo tipo suizo abierto por la mitad y relleno generosamente con una crema de mantequilla exquisita. Y para los amantes del hojaldre, la Pantxineta (rellena de crema y cubierta de almendras) es una apuesta segura. Acompaña cualquiera de estos dulces con un buen café y tendrás el desayuno o la merienda perfecta.
Maridaje Perfecto: Txakoli, Sidra y Vinos de Rioja Alavesa
Para acompañar esta magnífica gastronomía, Bilbao ofrece excelentes opciones líquidas. El rey local es el Txakoli de Bizkaia (Bizkaiko Txakolina), un vino blanco joven, afrutado, con una ligera aguja (carbónico) y una agradable acidez que lo hace ideal para el aperitivo y los pescados. Pídelo y disfruta del ritual de escanciarlo desde cierta altura para que rompa en el vaso.
Aunque menos típica de Bilbao ciudad que de Gipuzkoa, también puedes encontrar buena sidra natural vasca ("sagardoa"), especialmente en temporada (de enero a abril), cuando abren las sidrerías ("sagardotegiak"). Y por supuesto, dada la cercanía, los vinos de Rioja Alavesa (la parte vasca de la D.O.Ca. Rioja) tienen una presencia destacada, tanto tintos como blancos. No faltan opciones para brindar durante tu viaje a Bilbao.
Explorando los Fascinantes Alrededores de Bilbao
Bilbao es una base perfecta para descubrir los tesoros que esconde Bizkaia y el resto del País Vasco. Si dispones de varios días, te recomendamos encarecidamente realizar alguna excursión para conocer la espectacular costa, la verde naturaleza del interior o pueblos llenos de historia y encanto.
La Costa Vizcaína: Getxo, Puente Colgante y Playas Salvajes
A un corto trayecto en metro desde Bilbao (Línea 1), llegarás a Getxo. Este municipio residencial combina la elegancia de las mansiones de la burguesía industrial en la zona de Neguri con el encanto marinero del Puerto Viejo de Algorta. Pero su gran atracción es el Puente de Bizkaia, más conocido como Puente Colgante. Declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, esta impresionante estructura de hierro de 1893, obra de Alberto de Palacio (discípulo de Eiffel), sigue transportando vehículos y personas en su barquilla suspendida sobre la ría, conectando Getxo con Portugalete. Cruzarlo, ya sea en la barquilla o por la pasarela superior (a 50 metros de altura, ¡con vistas espectaculares!), es una experiencia única.

Siguiendo la costa hacia el norte desde Getxo, encontrarás un litoral abrupto y espectacular. Localidades como Sopelana son famosas por sus playas abiertas al Cantábrico, ideales para practicar surf (La Salvaje, Arrietara). Más allá, Plentzia ofrece una bahía más resguardada con una bonita playa familiar y un casco antiguo con encanto. Y si buscas paisajes realmente salvajes, acércate a los acantilados de Barrika, escenario de películas y series. Una ruta costera es un plan perfecto para complementar tu visita a Bilbao.
San Juan de Gaztelugatxe: Un Escenario de Leyenda
Posiblemente uno de los lugares más mágicos y fotografiados de la costa vasca. San Juan de Gaztelugatxe es un pequeño islote unido a tierra firme por un puente de piedra y una zigzagueante escalinata de 241 peldaños que conducen a una ermita dedicada a San Juan Bautista. El entorno es simplemente espectacular, con el mar Cantábrico rompiendo contra las rocas. La tradición dice que hay que tocar la campana de la ermita tres veces y pedir un deseo.

Su aparición en la serie "Juego de Tronos" como Rocadragón disparó su fama mundial, por lo que ahora es imprescindible reservar entrada gratuita online con antelación para poder acceder al camino y la escalinata, especialmente en temporada alta y fines de semana. La subida requiere cierto esfuerzo, pero las vistas desde arriba y la sensación de estar en un lugar tan especial compensan con creces. Se encuentra entre Bakio y Bermeo, a unos 35 km de Bilbao.
Urdaibai: Naturaleza, Historia y Surf
Declarada Reserva de la Biosfera por la UNESCO, la Ría de Urdaibai es un estuario de gran valor ecológico y paisajístico formado por el río Oka. Sus marismas son un paraíso para las aves migratorias (puedes visitar el Urdaibai Bird Center). En sus márgenes se encuentran localidades cargadas de significado, como Gernika-Lumo, símbolo de la paz y las libertades vascas. Visita la Casa de Juntas y el Árbol de Gernika, y el Museo de la Paz para recordar el trágico bombardeo de 1937 inmortalizado por Picasso.
Urdaibai también ofrece playas espectaculares como las de Laida y Laga, ideales para familias y surfistas. Y hablando de surf, Mundaka, un pintoresco pueblo pesquero en la boca de la ría, es mundialmente famosa por su ola izquierda, considerada una de las mejores de Europa. Si buscas arte y naturaleza combinados, no te pierdas el Bosque Pintado de Oma, una intervención artística de Agustín Ibarrola sobre los troncos de los pinos (actualmente se está trasladando a una nueva ubicación, consulta su estado). Una excursión por Urdaibai es perfecta para los amantes de la naturaleza que estén de turismo en Bilbao.
Las Otras Capitales Vascas: Vitoria y San Sebastián
Si dispones de un día completo, puedes plantearte visitar las otras dos capitales vascas, ambas a aproximadamente una hora en coche o autobús desde Bilbao. Vitoria-Gasteiz, la capital administrativa del País Vasco, te sorprenderá con su bien conservado casco medieval en forma de almendra, sus palacios renacentistas, la imponente Catedral de Santa María (famosa por su programa "Abierto por Obras") y su Anillo Verde, que la convirtió en Capital Verde Europea. Es una ciudad tranquila y muy agradable para pasear.
San Sebastián (Donostia), por su parte, es pura elegancia y belleza natural. Famosa por la espectacular Bahía de La Concha, su playa urbana más icónica, es una ciudad señorial con edificios de la Belle Époque, un animado Casco Viejo repleto de bares de pintxos (¡la competencia con Bilbao es feroz y deliciosa!), y el famoso Festival Internacional de Cine. Subir al Monte Igueldo para disfrutar de las vistas de la bahía es imprescindible.
El Interior de Bizkaia: Duranguesado y Encartaciones
Para los que buscan explorar zonas menos turísticas pero igualmente interesantes, el interior de Bizkaia ofrece paisajes verdes y villas históricas. La comarca del Duranguesado, a los pies del imponente Parque Natural de Urkiola, cuenta con localidades como Durango, con un interesante casco histórico, y Elorrio, famosa por sus palacios y casas solariegas blasonadas. Es una zona ideal para el senderismo y disfrutar de la montaña vasca.
Hacia el oeste, la comarca de Las Encartaciones (Enkarterri), la más occidental de Bizkaia, atesora un rico patrimonio histórico y natural. Balmaseda, la primera villa fundada en Bizkaia (1199), conserva un hermoso puente medieval y un casco antiguo con encanto. También puedes visitar las Cuevas de Pozalagua, con una espectacular concentración de estalactitas excéntricas, o el Karpin Abentura, un centro de acogida de fauna silvestre. Son opciones diferentes para profundizar en tu visita a Bilbao y sus alrededores.
Alojamiento en Bilbao: Encuentra tu Hogar Temporal Ideal
Elegir dónde dormir es una parte crucial de la planificación de tu viaje. Bilbao ofrece una amplia gama de alojamientos para todos los bolsillos y estilos, desde hoteles de lujo con vistas espectaculares hasta hostales económicos y prácticos apartamentos turísticos. ¡Vamos a ver las opciones!
Hoteles con Encanto y Servicios Premium
Si buscas la máxima comodidad, servicios de primera y una ubicación privilegiada, Bilbao cuenta con excelentes hoteles de 4 y 5 estrellas. Muchos se concentran en el Ensanche, la zona comercial y financiera, cerca de la Gran Vía y la Plaza Moyúa. También hay opciones fantásticas en la zona de Abandoibarra, con vistas al Museo Guggenheim y la ría, perfectas para una estancia centrada en la cultura y la modernidad.
Encontrarás tanto hoteles de grandes cadenas internacionales como establecimientos boutique con un diseño cuidado y atención personalizada. Algunos ocupan edificios históricos rehabilitados, añadiendo un toque de encanto a tu estancia. Son ideales para viajes de negocios, ocasiones especiales o simplemente si quieres darte un capricho durante tu visita a Bilbao. Reserva con antelación, especialmente si buscas habitaciones con vistas específicas.
Apartamentos Turísticos: Libertad y Comodidad
Esta opción ha ganado mucha popularidad en los últimos años, y por buenas razones. Alquilar un apartamento turístico te da la libertad de sentirte como en casa, con tu propio espacio, cocina y horarios flexibles. Es una alternativa ideal para familias con niños, grupos de amigos o para estancias más largas. La oferta en Bilbao es muy amplia y variada.
Puedes encontrar desde modernos lofts en zonas renovadas como Bilbao La Vieja o San Francisco, hasta pisos con sabor tradicional en pleno Casco Viejo o apartamentos funcionales en el Ensanche. Compara precios, ubicaciones y servicios (wifi, parking, etc.). Plataformas online como Airbnb o Booking.com facilitan la búsqueda, pero revisa siempre las opiniones de otros huéspedes. Es una forma estupenda de vivir la ciudad a tu aire.
Hostales, Pensiones y Albergues: Opciones Económicas y Sociales
Para los viajeros que buscan ajustar su presupuesto sin renunciar a una buena ubicación, Bilbao ofrece numerosas pensiones, hostales y albergues (hostels). Muchos se sitúan en el Casco Viejo, lo que te permite estar en el corazón del ambiente, aunque a veces puede ser un poco más ruidoso por la noche. También hay buenas opciones en barrios cercanos bien comunicados como Indautxu o Santutxu.
Las pensiones y hostales suelen ofrecer habitaciones privadas sencillas pero limpias, a menudo con baño compartido o privado. Los albergues modernos suelen tener tanto habitaciones compartidas (dormitorios) como privadas, y fomentan un ambiente social con zonas comunes, cocinas compartidas y actividades organizadas. Son perfectos para viajeros solos o jóvenes que buscan conocer gente mientras realizan su visita turística a Bilbao.
Consejos Clave para Reservar tu Alojamiento al Visitar Bilbao
¿Qué zona elegir? Si buscas ambiente, historia y pintxos a la puerta, el Casco Viejo es tu sitio (ten en cuenta el posible ruido nocturno). Si prefieres elegancia, tiendas, comodidad y tranquilidad, opta por el Ensanche (Abando, Indautxu). Para estar cerca del Guggenheim y la modernidad, elige Abandoibarra. Si buscas un ambiente más alternativo y bohemio, Bilbao La Vieja puede ser interesante.
Sea cual sea tu elección, el transporte público de Bilbao (metro, tranvía, autobús) es eficiente y conecta bien todas las zonas céntricas. Define tu presupuesto, tus prioridades (ubicación, tranquilidad, servicios) y reserva con la mayor antelación posible, sobre todo si viajas en temporada alta, durante la Aste Nagusia o en puentes festivos. Leer comentarios recientes de otros viajeros siempre es una buena ayuda para tomar la decisión final sobre tu alojamiento en Bilbao.
¿Ya te has decidido a visitar Bilbao?
Como has podido comprobar, Bilbao es una ciudad de múltiples caras, capaz de sorprender y enamorar a cada paso. Desde la vanguardia arquitectónica del Guggenheim hasta el bullicio histórico de las Siete Calles, pasando por una gastronomía que roza la perfección y unos alrededores llenos de belleza natural y cultural. Es un destino que combina a la perfección tradición y modernidad, ofreciendo planes para todos los gustos y edades. Esperamos que esta extensa guía te sirva de inspiración y herramienta útil para organizar tu escapada. No lo pienses más, ¡la increíble experiencia de visitar Bilbao te está esperando! ¡Prepárate para disfrutarla al máximo!